La Red Feminista Frente a la Violencia contra las Mujeres en El Salvador (integrada por ORMUSA, LAS DIGNAS Y LAS MÉLIDAS) y la Concertación Feminista Prudencia Ayala, inician este día el mes de activismo contra la violencia contra las mujeres, en el marco de la conmemoración del "25 de noviembre Día Internacional de la No Violencia contra las Mujeres".El mes de activismo comprende acciones locales y nacionales desarrolladas por el movimiento de mujeres, incluída en esta la macrha del 25 de noviembre, para expresar nuestra preocupación por la creciente violencia contra las mujeres salvadoreñas y denunciar públicamente la falta de aplicación de justicia en diferentes casos de violencia contra las mujeres.
Entre esos casos está el de la menor Katya Miranda, violada y asesinada el 4 de abril de 1999. Desde entonces, su madre - Hilda María Jiménez, organizaciones de la sociedad y del movimiento de mujeres, hemos exigido una investigación exhaustiva que permite sancionar a los responsables de este crimen emblemático, que representa la realidad de muchas niñas, adolescentes, jóvenes y adultas, que día a día son víctimas de violencia por familiares, personas particulares y por el Estado mismo, al no recibir la justicia que merecen.
Instituciones oficiales y medios de comunicación registran a diario, violaciones a los derechos humanos de las mujeres, aunque algunas veces estos actos sólo son considerados como un "simple número de mujeres" que han sido objeto de hechos violentos mísóginos y discriminatorios y cuyas historias se convierten en una noticia o un dato más, entre estos:
* Wendy Magali Pineda, de 9 años, cuyo cadáver fue encontrado degollado en Aguilares, en 1999; meses después del asesinato y violación de Katya Miranda.
* Una niña con incapacidad mental sufrió violencia sexual y física dentro de un centro de protección gubernamental para niós especiales de San Martínb, durante ocho meses.
* Una menor de 14 años fue violada en reiteradas ocasiones por su padre, un hermano y un tío, desde que tenía 8 años, en San Salvador.
* Una mujer fue violada y mutilada por su compañero de vida en Nueva Esparta, departamento de La Unión. El agresor es prófugo de la justicia desde que el Juez de Paz de Nueva Esparta, consideró que no habían pruebas contundentes en el caso de violación y por tanto lo favoreció con medidas sustitutivas a la prisión.
* Una mujer fue atacada con arma blanca por su compañero de vida, en su vivienda ubicada en Chinameca, departamento de San Miguel, en mayo de 2008.
* Una mujer de 36 años fue asesinada por desconocidos en el interior de su vivienda ubicada en la colonia La Esperanza, Zacatecoluca, en La Paz.
* Una joven no identificada fue encontrada asesinada con arma de fuego en la carretera del volcán Chinchontepec, en San Vicente.
* Una menor de edad fue agredida sexualemente por su profesor de música y este fue sobreseído.
* Una niña de 14 meses fue violada por dos hombres y uno de ellos ha sido sobreseído el mes pasado por falta de pruebas.
De continuar esta situación de indiferencia, otros casos probablemente quedarán en la impunidad si el Estado continúa en una posición de no investigar, procesar y castigar a los responsables, manteniendo a las mujeres en situación de riesgo y sin protección, pese a que es obligación del Estado garantizar el derecho de las mujeres a vivir una vida libre de violencia.
El 80% del total de 243 partos en adolescentes atendidos en el Hospital de Maternidad, fue producto de violación.
Ante esta problemática la Red Feminista frente a la Violencia contra las Mujeres y La Concertación Feminista Prudencia Ayala, demandamos al Estado Salvadoreño: 1. A las autoridades responsables de la investigación del delito (Policía Nacional Civil y Fiscalía General de la República), que cumplan con efectividad su rol en la investigación de los feminicidios.
2. El esclarecimiento y justicia en el proceso judicial por el feminicidio de Katya Miranda que igualmente se haga justicia investigando y dando respuesta a cientos de niñas, adolescentes, mujeres jóvenes y adultas víctimas de violencia, a quienes el Estado adeuda justicia ya que los autores de los crímenes continúan impunes.
3. Que aplique y haga funcionar todas las políticas, leyes y programas en materia de prevención, detección y atención de la violencia contra las mujeres, que permita garantizar el respeto y goce del derecho a la vida, seguridad e integridad personal de las mujeres y su derecho humano a vivir una vida libre de violencia.
4. Finalmente que se resarza el daño a las mujeres y sus familiares que son sobrevivientes de la violencia física, sexual, psicológica, patrimonial y el feminicidio.
5. En consonancia con la demanda anterior exigimos:
* Incorporar en el Código Penal el delito de feminicidio
* Se apruebe el anteproyecto de la Ley de Protección Integral a Víctimas de Violencia.
* Se ratifique el Protocolo Facultativo de la Convención sobre la Eliminación de todas las Formas de Discriminación contra la Mujer (CEDAW).
EXIGIMOS INVESTIGACIÓN Y JUSTICIA POR LA VIDA DE LAS MUJERES
¡BASTA YA DE IMPUNIDAD!
[1] Conjunto de violaciones reiteradas y sistemáticas a los derechos humanos de las mujeres y un estado de violencia misógina contra ellas, que conduce a agresiones, ataques, maltrato y daños que culminan, en algunos casos en asesinatos crueles de las mujeres (que son cifras correspondientes a los asesinatos de mujeres que hemos presentado en el cuadro anterior)
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